La técnica Reiki equilibra y reestablece nuestras energías, además de desbloquear todo tipo de nudos energéticos. Es ideal que cada día se haga una autoaplicación, de modo que se alcance poco a poco el equilibrio integral. Eso la hará una persona centrada, menos reactiva y menos ansiosa, por el simple hecho de traer luz a su cuerpo físico y sistema energético.

A lo largo de los días, no puede dejar de experimentar situaciones de diferente naturaleza que le desagradan. Es inevitable, pero puede hallar una solución gracias al reiki, que le ayuda a combatir la ansiedad…

El propio maestro Mikao Usui ya indicaba la práctica diaria de la meditación Gassho’s y la aplicación de Reiki por la mañana y la noche. La práctica matutina nos energiza y nos prepara para el día, trayendo equilibrio y armonía, cultivando buenas relaciones y atrayendo menos situaciones conflictivas. Si surgen situaciones así, el hecho de que haya repetido los principios del Reiki funciona como una especie de ancla, que nos calma y hasta cierto punto nos blinda. La práctica de Gokai al final del día funciona como una evaluación de sus actos, sentimientos y pensamientos. Podemos elegir cómo reaccionar y, en ese caso, siempre debemos buscar la Luz Divina, centrándonos en la frecuencia de energías saludables.

El equilibrio y la armonía que Reiki nos trae nos ayuda a vivir mejor y, en consecuencia, la ansiedad disminuye naturalmente. Así que aplique Reiki, repita los cinco principios y reflexione sobre cada principio y sus propias acciones. Eso es fundamental en la meditación Gasso y eso es lo que da resultados reales. Ponga buenas intenciones en sus pensamientos y acciones. Preste mucha atención a sus pensamientos, emociones y compruebe si son esenciales para su momento actual.

Si la respuesta es sí, aplique Reiki en la situación con la técnica de reducción, medite y se ponga receptivo a las soluciones, pida respuestas, pero no las busque en ese momento, juegue al universo y esté atento a las señales.

Si la respuesta es no, tome respiraciones conscientes, concéntrese en su actividad o busque otra actividad que la implique, si no ha funcionado con el cambio de pensamientos, elija y aplique otras de las técnicas de Reiki aquí indicadas.

A veces un pensamiento puede causarle ansiedad. Así que cuida la calidad de tus pensamientos, empezando por averiguar si están basados en hechos reales, en trajes imaginarios o si hay recuerdos y filtros actuando para llegar a conclusiones. No tener esa claridad produce ansiedad. No basta con aplicar las técnicas Reiki, es fundamental hacer la reforma íntima, reflexionando sobre nuestros propios patrones de pensamiento y comportamiento, identificando lo que debe transformarse. Tan importante como identificar es aceptar esa reforma, sin autocrítica, utilizando el Reiki. Eso trae paz interior y calma, evitando y eliminando la ansiedad.

Y vosotros, ¿practicáis reiki?