Aunque hasta hace pocos años no eran muy populares, en los últimos tiempos parecen haberse puesto de moda las llamadas velas orgánicas (mucho mejores que los velones orgónicos). Para llamarlas y definirlas de una manera simple, podríamos decir que son algo así como un pack todo en 1, ya que la vela ya viene preparada con los ingredientes que nos permitirán hacer el ritual que deseamos.
Además de eso, las velas vienen ya ritualizadas y limpiadas, es decir, se asegura que está libre de cualquier carga negativa. Las velas orgánicas deben venir “envueltas” de hierbas, es decir, es un paso habitual en algunos rituales, que consiste en “forrar” (por llamarlo de alguna manera) las velas con las hierbas indicadas para que se cumpla el ritual que queremos hacer. Así, por ejemplo, si queremos hacer un ritual para el amor, es muy habitual que las instrucciones del ritual nos inviten a usar hierbas de menta china (para el amor) en una vela rosa.
Siguiendo esta costumbre, y siguiendo este ejemplo, una vela orgánica (previamente preparada) que usted puede adquirir en una tienda, vendrá en su correspondiente bolsita preparada ya ritualizada, y envuelta con hierbas de menta china. Comprándola, usted se asegura que todos los pasos necesarios previos al ritual han sido realizados de manera correcta.
A partir de aquí, su única faena será quemar la vela adquirida (siguiendo las instrucciones indicadas, en caso de haberlas). Intente que las velas orgónicas que usted adquiere vayan SIEMPRE bien envueltas, para evitar de esta manera que las haya estado manoseando más gente que el fabricante ritualista y usted mismo.
Recuerde, y no me cansaré de decirlo que las velas orgónicas son más efectivas que los velones, pues siendo más pequeñas aprovechan MUCHO más las propiedades de las hierbas mágicas (además de ser en general más económicas).
En un próximo post o una nueva sección (el tiempo libre dirá), daré un listado de los principales y que nos pueden servir para casi todos los problemas que nos preocupen o aquellos propósitos que tengamos en mente.
Salud y Paz,
M.
Muy bueno
Gracias 😉